UCDM Lección 356: La enfermedad no es sino otro nombre para el pecado. La curación no es sino otro nombre para Dios. El milagro es, por lo tanto, una invocación que se le hace a Él

1. Padre, prometiste que nunca dejarías de contestar cualquier invocación que Tu Hijo pudiera hacerte. 2 No
importa dónde esté, cuál parezca ser su problema o en qué crea haberse convertido, 3 él es Tu Hijo y Tú le
responderás. 4 El milagro es un reflejo de Tu Amor, por lo tanto, es la contestación que él recibe. 5 Tu Nombre
reemplaza todo pensamiento de pecado, y aquel que es inocente jamás puede sufrir dolor alguno. 6 Tu Nombre
es la Respuesta que le das a Tu Hijo porque al invocar Tu Nombre él invoca el Suyo Propio.

COMENTARIO DE JESÚS CANALIZADO POR TINA SPALDING
Vosotros sois de hecho seres bendecidos. Yo soy aquel que conoces como Jesús. La enfermedad es el mayor argumento del ego para decir que has sido abandonado por Dios, ¿no es así?
Cuando tu cuerpo parece ir mal por su propia voluntad, te sientes traicionado. La verdad es que tu cuerpo no va mal por voluntad propia. Es un reflejo de las frecuencias de pensamiento y creencia que tienes. Si crees en la enfermedad, entonces puedes enfermar. Si crees en la muerte, entonces puedes morir.
Es muy, muy importante en esta etapa de tu desarrollo ver más allá de la enfermedad, como hice yo en mi encarnación en el plano terrestre hace tantos años. Eso es lo que hice cuando curé a la gente. Tenía tal convicción de que estaban bien, y mi frecuencia era muy alta debido a los estudios y las prácticas que había realizado durante muchos años, así que pude anular sus creencias y demostrarles que los milagros pueden ocurrir.
Los milagros pueden ocurrirte a ti. Si estás enfermo, entra en tu mente e investiga dónde residen tus creencias sobre la enfermedad y cuáles son. Queremos que las cambies. Queremos que te conviertas en una mente milagrosa. Así que en lugar de hablar de tu enfermedad—compartiendo tu enfermedad con los demás, diciéndoles lo mal que te sientes— declárate a ti mismo: «Estoy bien. Nunca me enfermo.» Lo que sucederá es que empezarás a ver un cambio en la frecuencia con la que te enfermas y esto se debe a tus creencias. Tu cuerpo es el efecto de tu mente. Es así de simple.
Yo soy aquel que conoces como Jesús, y te hablaremos mañana.