UCDM Lección 268: Que todas las cosas sean exactamente como son

1. Que hoy no sea Tu crítico, Señor, ni que juzgue contra Ti. 2 Que hoy no interfiera en Tu Creación,
desfigurándola y convirtiéndola en formas enfermizas. 3 Que esté dispuesto a no atacar Su unidad
imponiéndole mis deseos, y así dejarla ser tal como Tú la creaste. 4 Pues de esta manera seré también capaz
de reconocer a mi Ser tal como Tú lo creaste. 5 Fui creado en el Amor y en el Amor he de morar para siempre.
6 ¿Qué podría asustarme si dejo que todas las cosas sean exactamente como son?
2. Que nuestra vista no sea blasfema hoy y que nuestros oídos no hagan caso de las malas lenguas. 2 Sólo la
realidad está libre de dolor. 3 Sólo en la realidad no se experimentan pérdidas. 4 Sólo la realidad ofrece
completa seguridad. 5 Y esto es lo único que buscamos hoy.

COMENTARIO DE JESÚS CNALIZADO POR TINA SPALDING
Vosotros sois de hecho seres bendecidos. Yo soy aquel que conoces como Jesús. La mayoría de ustedes no están viviendo en la realidad, viven en un mundo de fantasía del que son el director.
Ahora, parece como si hubiera una contradicción aquí. Decimos que eres el creador de tu realidad y, sin embargo, aquí decimos que tu realidad es incorrecta. Lo que queremos aclarar en esta lección es que cuando no estás alineado con el amor y no has clarificado las ideas y creencias falsas de tu mente, estás viviendo en una versión distorsionada de la realidad. Vivirás mucho en tu mundo futuro; es un mundo imaginario. Tu mundo futuro es un mundo de fantasía. No te das cuenta de esto cuando imaginas, al igual tal vez que cuando conduces tu coche, lo que va a pasar cuando llegues a casa. Crees esas películas que ves en tu cabeza; pero, de hecho, estás inventando una fantasía a partir de las distorsiones en tu mente. No estás permitiendo que tu vida se desarrolle como debería.
Los resentimientos, por supuesto, son regurgitaciones de viejas peleas, viejas heridas, viejos sufrimientos. Una vez más, dejas el momento presente y vives en un mundo de fantasía— tu fantasía de lo que sucedió, de ser tratado injustamente o de ese “pecador” haciendo algo en tu contra. Muchos de ustedes que han tenido experiencias desagradables quieren protestar y decir: “¡Pero realmente sucedió!”. Sí, quizás tuviste una experiencia que no fue divertida, pero cada vez que revives y reclamas como tuya, te vuelves a infligir ese dolor. La otra persona, la persona que pudo haberte lastimado una vez en el pasado, no está involucrada en la victimización. Tú lo estás. Tú estás eligiendo regresar y revivir, las escenas en tu mente, de algo malo que te sucedió porque lo quieres.
Esta es una parte muy difícil de este proceso de perdón para aquellos de ustedes que tienen heridas que han nutrido y alimentado durante mucho tiempo. Pero te aseguramos aquí que no quieres esas heridas. No quieres ese resentimiento. No quieres que esa energía contaminante crezca en el presente y vuelva a aparecer en el futuro, porque eso es lo que sucederá. Cuando eliges usar tu momento presente en regurgitar viejas heridas y dolores, estás plantando semillas para esa misma frecuencia en el futuro.
Te animamos aquí. Incluso aquellos de ustedes que consideran que han sufrido pecados imperdonables cometidos contra ustedes en su pasado, les pedimos que los liberen. Te pedimos que dejes de pensar en ellos y de jugar con ellos, y de alimentarlos con tu poderosa energía, porque eso es lo que estás haciendo. Cada vez que recuerdes esa terrible historia a tus amigos, esa cosa espantosa que te sucedió, estás infundiendo con tu poder— tu poder creativo dado por Dios: el poder de crear mundos.
Queremos que crees un mundo hermoso para ti, un sueño feliz aquí mientras vives en separación, y es posible si entrenas tu mente. Haz tu lección hoy. Perdona el pasado. Deja de pensar en cualquier otra cosa que no sea lo que está sucediendo en este momento, y aprecia las oportunidades que te brinda cada día para compartir tu magnificencia con tus hermanos y hermanas.
Yo soy aquel que conoces como Jesús, y te volveremos a hablar mañana.