1. Padre, hay una visión que ve todas las cosas sin mancha alguna de pecado, lo cual indica que el miedo ha
desaparecido y que en su lugar se ha invitado al amor. 2 Y éste vendrá dondequiera que se le invite. 3 Esta
visión es Tu regalo. 4 Los ojos de Cristo contemplan un mundo perdonado. 5 Ante Su vista todos los pecados
del mundo quedan perdonados, pues Él no ve pecado alguno en nada de lo que contempla. 6 Que Su verdadera
percepción venga a mí ahora para poder despertar del sueño de pecado y ver mi impecabilidad en mi interior,
la cual Tú has conservado completamente inmaculada en el altar a Tu santo Hijo, el Ser con Quien quiero
identificarme.
2. Contemplémonos hoy los unos a los otros con los ojos de Cristo. 2
¡Qué bellos somos! 3
¡Cuán santos y
amorosos! 4 Hermano, ven y únete a mí hoy. 5 Salvamos al mundo cuando nos unimos. 6 Pues en nuestra visión
el mundo se vuelve tan santo como la luz que mora en nosotros.
COMENTARIO DE JESÚS CANALIZADO POR TINA SPALDING
Vosotros sois de hecho seres bendecidos. Yo soy aquel que conoces como Jesús. Tu percepción, tal y como la experimentas, es lo que ves e interpretas que es el mundo a través de todas las lentes distorsionadas fabricadas por las creencias que tienes en tu mente y que no son ciertas. La verdad es que las cosas simplemente suceden. Hay gente que cruza la carretera. Hay personas que nacen y otras que mueren, pero tú estás poniendo una historia a todo a través de esos lentes de percepción.
Queremos que comprendas que hay una verdad con la que puedes conectar, pero debes pedir que tu percepción sea sanada para que puedas ver esa verdad. Tienes creencias viviendo en tu mente por tu voluntad de tenerlas ahí. Están ahí porque crees en ellas, y las aplicas porque crees en ellas.
El Espíritu Santo es el intermediario entre tu consciencia y la consciencia de Cristo. El Espíritu Santo entiende que tienes distorsiones y entiende la verdad; actúa como un puente entre estas dos formas, de cualquier manera que funcione para tu mente engañada.
No necesitas saber cómo funciona esto. Sólo necesitas entender que tienes que estar dispuesto a sanar tu percepción y eso viene a través de tu práctica del perdón. Cuando lo haces, estás diciendo: «Entiendo que no comprendo lo que está sucediendo aquí. Voy a perdonar a la persona que está enfadada conmigo. Voy a permitir que esto sea una parte de mi propia consciencia revelándose a mí aunque no lo comprenda verdaderamente». Tu voluntad consciente de sanar esa percepción es lo que te traerá la paz.
No es necesario que entiendas este proceso; simplemente entiende que tienes estas creencias residiendo en tu mente y que estás actuando sobre ellas mediante el uso de tu libre albedrío. Ahora debes usar tu libre albedrío para decir: “Entrego mi mente para que mis percepciones sean sanadas». Con el tiempo, si continúas haciendo esta ofrenda, tus percepciones serán sanadas y comenzarás a ver las cosas de manera diferente.
Cuando tu percepción sea curada el mundo deberá cambiar, porque tú eres el proyector; tú eres el creador. Así es como llegas a comprender verdaderamente el milagro. Es porque tú eres el que está causando lo que está sucediendo en tu experiencia, y cuando cambias tu mente y estás dispuesto a ser sanado de tus percepciones erróneas, el mundo cambiará. Puede que te sanes de alguna enfermedad. Las relaciones pueden cambiar. Tu nivel de abundancia puede cambiar. Todas estas cosas pueden cambiar cuando tú estás dispuesto a que tu percepción sea sanada. Pero debes mostrar, voluntariamente, voluntad; y debes pedir que se haga por ti, porque ahora entiendes que tu percepción y tu mala interpretación de la realidad es lo que causa tu sufrimiento. Aquí el sufrimiento es opcional.
Yo soy aquel que conoces como Jesús, y te hablaremos mañana.