1. ¿Qué otra cosa sino la visión de Cristo querría utilizar hoy cuando me puede conceder un día en el que veo un
mundo tan semejante al Cielo que un viejo recuerdo vuelve a aflorar en mi conciencia?
2 Hoy puedo olvidarme
del mundo que fabriqué. 3 Hoy puedo ir más allá de todo temor y ser restaurado al amor, a la santidad y a la
paz. 4 Hoy soy redimido y vuelvo a nacer en un mundo misericordioso y solícito; un mundo lleno de bondad en
el que reina la Paz de Dios.
2. Y de esta manera, Padre nuestro, regresamos a Ti, recordando que nunca nos ausentamos; recordando los
santos dones con los que nos has agraciado. 2 Venimos llenos de gratitud y aprecio, con las manos vacías y
con nuestras mentes y corazones abiertos, pidiendo tan sólo lo que Tú concedes. 3 Ninguna ofrenda que
podamos hacer es digna de Tu Hijo. 4 Pero en Tu Amor se le concede el regalo de Cristo.
COMENTARIO DE JESÚS CANALIZADO POR TINA SPALDING
Vosotros sois de hecho seres bendecidos. Yo soy aquel que conoces como Jesús. En tu sociedad me conocen como Jesucristo. La nomenclatura “Cristo” se refiere a lo que me sucedió como resultado de mi práctica del perdón.
Eso es lo que me sucedió. No quiero que pienses que yo soy más especial que tú. Soy de hecho “el hermano mayor” al que Un Curso de Milagros hace referencia. Se refiere a un ser más sabio, con más experiencia que puede enseñarte a madurar por ti mismo, y para eso son estas lecciones. Te pedimos que madures y te salgas de las formas dementes, inconsecuentes y violentas del ego para convertirte en un ser más amoroso.
Muchos de ustedes dirán: “Yo no soy inconsecuente. Voy al trabajo cada día. No soy violento. No le disparo a nadie”. Ahora, ve a tu mundo interno y pregúntate: “¿Qué tan consecuente es mi mundo interno? ¿Qué tan calmado y amoroso es mi mundo interno?” No nos referimos a los comportamientos en los que has sido adoctrinado a través de programas de condicionamiento. Nos referimos a la parte verdadera que está dentro de ti.
Recuerda, tus manifestaciones van a ser un reflejo de la parte verdadera que está dentro de ti, no de tu cara social y tampoco de la cara de inocencia que el ego dibuja en ti, sino de la verdad de tu frecuencia interna—todos los altibajos, los odios, los miedos y el auto desprecio contenido ahí. Por eso tienen ese dicho que dice: “Las cosas malas le suceden a la gente buena”, y esto es porque el comportamiento de la gente parece ser bueno. Parece ser bello, amable y correcto, pero por dentro pueden estar hirviendo de frustración, ira y vergüenza. Esto es lo que generará lo que tú consideras cosas “malas”.
Recuerda, no hay secretos que se puedan ocultar aquí en este plano. Inclusive cuando no pronuncies ni una palabra, tu frecuencia emite aquello que crees, sientes y piensas todo el tiempo—todo el tiempo. Y el universo está escuchando y reflejándote esa frecuencia.
Por favor, deja de jugar a la víctima. Entra en tu Yo Crístico y entrena tu mente para el amor. Cuando encuentres una parte no amorosa de tu mente, no te condenes a ti mismo. En su lugar repite: “Ya no se te autoriza residir dentro mi espacio sagrado. Debes irte. Y para ejecutar esa partida, ya no voy a creer en los pensamientos que generas. No voy a actuar como si lo que dices fuera cierto, porque puedo sentir que la frecuencia no es amorosa».
Existe una responsabilidad que todos ustedes tienen que soportar porque se les ha dado libre albedrío. Esta responsabilidad es la de dejar de creer en los pensamientos que estas creencias no amorosas generan, y dejar de actuar como si cada idea que tienes en tu mente fuera verdadera; sea una idea llena de odio o no. Utiliza tu libre albedrío para elegir un comportamiento que sea más estilo Crístico. Por cierto, siempre te recordamos incluirte en este principio amoroso.
Yo soy aquel que conoces como Jesús, y te volveremos a hablar mañana.