1. La Paz y la Dicha de Dios te pertenecen. 2 Hoy las aceptaremos sabiendo que son nuestras. 3 Y trataremos de
entender que estos regalos se multiplican a medida que los recibimos. 4 No son como los regalos que el mundo
da, en los que el que hace el regalo pierde al darlo, y el que lo recibe se enriquece a costa de la pérdida del que
se lo dio. 5 Eso no son regalos, sino regateos que se hacen con la culpabilidad. 6 Los regalos que
verdaderamente se dan no entrañan pérdida alguna. 7 Es imposible que alguien pueda ganar a costa de la
pérdida de otro. 8 Ello implicaría un límite y una condición de insuficiencia.
2. Ésa no es la manera de hacer regalos. 2 Tales “regalos” no son sino tratos que se hacen con vistas a obtener algo
de más valor; préstamos con intereses que se tienen que pagar en su totalidad; créditos a corto plazo en los que
el que recibió el regalo se compromete a pagar con creces lo recibido. 3 Esta extraña distorsión de lo que
significa dar impera en todos los niveles del mundo que ves. 4 Priva de todo sentido cualquier regalo que das y
hace que los que aceptas no te aporten nada.
3. Uno de los principales objetivos de aprendizaje de este curso es invertir tu concepto de lo que es dar, de modo
que puedas recibir. 2 Pues dar se ha convertido en una fuente de temor, y así evitas emplear el único medio
mediante el cual puedes recibir. 3 Acepta la Paz y la Dicha de Dios, y aprenderás a ver lo que es un regalo de
otra manera. 4 Los regalos de Dios no disminuyen cuando se dan. 5 Por el contrario, se multiplican.
4. De la misma manera en que la paz y la dicha del Cielo se intensifican cuando las aceptas como los dones que
Dios te da, así también la Dicha de tu Creador aumenta cuando aceptas como tuyas Su Dicha y Su Paz. 2 Dar
verdaderamente equivale a crear. 3 Extiende lo que no tiene límites a lo ilimitado, la eternidad hasta la
intemporalidad y el Amor hasta Sí Mismo. 4 Añade a todo lo que ya está completo, mas no en el sentido de
añadir más, pues eso implicaría que antes era menos. 5 Añade en el sentido de que permite que lo que no puede
contenerse a sí mismo cumpla su cometido de dar todo lo que tiene, asegurándose así de que lo poseerá para
siempre.
5. Acepta hoy la Paz y la Dicha de Dios como tuyas. 2 Permite que Él se complete a Sí Mismo, tal como Él define
lo que es estar completo. 3 Comprenderás que lo que le brinda compleción a Él se la brinda también a Su Hijo.
4 Él no puede dar mediante pérdidas. 5 Ni tú tampoco. 6 Acepta hoy Su regalo de dicha y de paz, y Él te dará las
gracias por el regalo que le haces a Él.
6. Nuestras sesiones de práctica de hoy comenzarán de manera ligeramente distinta. 2 Da comienzo al día
pensando en aquellos hermanos a quienes les has negado la paz y la dicha a las que tienen derecho de acuerdo
con las equitativas Leyes de Dios. 3 Al negárselas fue cuando te las negaste a ti mismo. 4 Y a ese punto es
adonde tienes que volver para reivindicarlas como propias.
7. Piensa en tus “enemigos” por un rato y dile a cada uno de ellos según cruce tu mente:
2 Hermano, te ofrezco paz y dicha para que la Paz y la Dicha de Dios
sean mías.
3 De esta manera te preparas para reconocer los regalos que Dios te ha dado y permites que tu mente se libre de
todo lo que te podría impedir triunfar hoy. 4 Ahora estás listo para aceptar el regalo de paz y de dicha que Dios
te ha dado. 5 Ahora estás listo para experimentar la dicha y la paz que te has negado a ti mismo. 6 Ahora puedes
decir: “Mías son la Paz y la Dicha de Dios”, pues has dado lo que quieres recibir.
8. Si preparas tu mente tal como te hemos indicado, no podrás sino tener éxito hoy. 2 Pues habrás permitido que se
levanten todas las barreras que te separan de la paz y de la dicha, para que por fin te llegue lo que es tuyo. 3 Di,
pues, para tus adentros: “Mías son la Paz y la Dicha de Dios”, cierra los ojos por un rato y deja que Su Voz te
asegure que las palabras que pronuncias son verdad.
9. Pasa hoy cinco minutos con Él de esta manera cada vez que puedas, pero no creas que menos tiempo de eso no
tiene valor cuando no le puedas dedicar más. 2 Cuando menos, acuérdate de repetir cada hora las palabras quelo exhortan a que te dé lo que es Su Voluntad dar y lo que es Su Voluntad que tú recibas. 3 Proponte hoy no
interferir en Sus designios. 4 Y si algún hermano pareciera tentarte a que le niegues el regalo que Dios le ha
hecho, considera eso como una oportunidad más para permitirte a ti mismo aceptar los dones de Dios como
tuyos. 5 Bendice entonces a tu hermano lleno de agradecimiento y di:
6 Hermano, te ofrezco paz y dicha para que la Paz y la Dicha de Dios
sean mías.
COMENTARIO DE JESÚS CANALIZADO POR TINA SPALDING
Vosotros sois de hecho seres bendecidos. Yo soy aquel que conoces como Jesús. Tal como tú lo entiendes, hay una frase que se me atribuye que dice que “debes orar por tus enemigos”. Eso es exactamente de lo que se trata esta lección. Esto es acerca de desear a tus enemigos aquello que tú desearías para ti mismo.
En esta oración, disuelves la separación. Te niegas a ver a un enemigo como un enemigo. Te niegas a ver el pecado como real, y te niegas a decir: “Hay necesidades separadas entre mi hermano, mi hermana y yo”. Todos somos iguales. Todos somos hijos de Dios. Todos merecemos la paz y la alegría que es nuestro derecho natural. Para que pueda tener mi paz y mi gozo, les ofrezco su paz y su gozo.
Cuando niegas a tus enemigos los pensamientos que esta lección te pide que le des, te niegas a ti mismo. Te niegas a ti mismo lo mismo que les niegas a ellos, porque ves en ti mismo lo que ves en tus hermanos y hermanas. Si ves a tus hermanos y hermanas como hijos santos de Dios, conectados a lo divino como tú y ellos se lo merecen, simplemente por su existencia, entonces ves lo mismo para ti mismo. Si ves a tus hermanos y hermanas como pecadores, separados de Dios, aislados, solos e indignos, lo magnificas para ti mismo, porque así es como funciona tu creatividad. Es tan poderoso. Recibes lo que das.
Esto es difícil para aquellos de ustedes que se criaron en el mundo material 3D, donde te enseñan que pierdes lo que das. Pero no es así, y aquí no solo hablamos de cosas materiales. Aquí es donde tu entrenamiento en el materialismo te dispara en el pie, por así decirlo, porque piensas que si das algo debe ser en forma física, material. No, puede ser un pensamiento amoroso. Puede ser una oración. Puede ser una idea. Estas son las cosas que son eternas; pensamientos, ideas, sentimientos. Estas son las cosas no físicas que dan origen al mundo material. No sólo da crédito a la copia impresa de algo. Recuerda que la copia empresa de algo— la copia física y material de algo— proviene primero de lo no-físico.
Sé generoso con tu amor a ti mismo y a los demás. Reza por tus enemigos. Sabes que orando por tus enemigos reduces la separación y el miedo en tu propia mente, porque demuestras tu comprensión en estas leyes que enseñamos aquí.
Yo soy aquel que conoces como Jesús. Nos veremos de nuevo mañana.