1. El miedo ya se acabó porque su fuente ha desaparecido y, junto con ella, todos sus pensamientos desaparecieron
también. 2 El amor sigue siendo el único estado presente, cuya Fuente está aquí por siempre y para siempre.
3 ¿Cómo iba a parecerme el mundo claro y diáfano, seguro y acogedor, cuando todos mis errores pasados lo
oprimen y me muestran manifestaciones distorsionadas de miedo?
4 Mas en el presente el amor es obvio y sus
efectos evidentes. 5 El mundo entero resplandece en el reflejo de su santa luz y por fin percibo un mundo
perdonado.
2. Padre, que Tu santo mundo no me pase desapercibido hoy
2 ni que mis oídos sean sordos a todos los himnos de
gratitud que el mundo entona bajo los sonidos del miedo. 3 Hay un mundo real que el presente mantiene a
salvo de todos los errores del pasado. 4 Y éste es el único mundo que quiero tener ante mis ojos hoy.
COMENTARIO DE JESÚS CANALIZADO POR TINA SPALDING
Vosotros sois de hecho seres bendecidos. Yo soy aquel que conoces como Jesús. Este es un concepto difícil de comprender— la paz, el amor y la alegría están aquí.
Tus terribles ideas simplemente te ocultan esa verdad para ti, y este es el mundo ilusorio del que escuchas a todos hablar. Este mundo terrible, lleno de muerte, sin amor e implacable en el que todos viven es un producto de sus propias mentes, un producto de sus propias imaginaciones. Sin embargo, si entrenas tu mente, si calmas tu mente, si dominas tu mente, una vez que todas las pruebas, tribulaciones e historias que el ego cuenta han sido puestas a dormir, lo restante es paz, alegría y amor. Eso es lo que hay detrás de todo el drama, el trabajo y los problemas que el ego-mente produce en tu mente.
Tu mente produce tu sufrimiento. Cuando aprendas a dejar de producir sufrimiento, descubrirás que eres feliz y que la paz está contigo siempre. Siempre lo estuvo, simplemente estaba oculta— al igual que las aguas tranquilas y profundas del océano se esconden debajo de las aguas tormentosas de arriba. Lo mismo que el sol está oculto por las nubes de tormenta. Recuerda, tu mundo físico siempre te está reflejando el estado de tu propia consciencia, y estas dos grandes demostraciones del estado de tu consciencia están ahí para mostrarte, para simbolizar, lo que está sucediendo dentro de ti.
Conviértete como el cielo azul, claro e iluminado por el sol sobre las nubes de tormenta; y conviértete como el océano profundo, silencioso y tranquilo bajo las olas. Te estarás alineando con tu verdadera naturaleza, que está ahí ahora esperando a que la encuentres.
Yo soy aquel que conoces como Jesús, y te volveremos a hablar mañana.