UCDM Lección 117: Repaso III: Parte 7

1. (103) Dios, al ser Amor, es también felicidad.
2 Quiero recordar que el amor es felicidad y que nada más me puede hacer feliz. 3 Elijo, por lo tanto, no
abrigar ningún substituto para el amor.
2. (104) Busco únicamente lo que en verdad me pertenece.
2 El amor, al igual que la dicha, constituyen mi patrimonio. 3 Éstos son los regalos que mi Padre me dio.
4 Aceptaré todo lo que en verdad me pertenece.
3. A la hora en punto:
2 Dios, al ser Amor, es también felicidad.
3 Media hora más tarde:
4 Busco únicamente lo que en verdad me pertenece.

COMENTARIO DE JESÚS CANALIZADO POR TINA SPALDING
Vosotros sois de hecho seres bendecidos. Yo soy aquel que conoces como Jesús. Éste es siempre un recordatorio muy importante: ¡tienes permiso para ser feliz!
La felicidad está alineada con el amor. Cuando disfrutas, digamos, hornear galletas para tu familia, y eso es algo que realmente disfrutas y te hace feliz, entonces eso es lo correcto para ti en ese momento. Si acostarte en tu cama en medio de la tarde para una siesta cuando estás cansado te da alegría, porque disfrutas tanto de esa sensación de rendirte a tu cama, ¡está bien! Puedes ser feliz y tomar una siesta. Estas son algunas de las cosas que te han enseñado que son intrascendentes, sin valor o incluso pecaminosos de alguna manera.
La felicidad es ese sentimiento: “Estoy haciendo exactamente lo que quiero hacer ahora mismo. Es perfecto. No quiero estar en ningún otro lugar. No envidio a nadie. No estoy codiciando nada, ni ídolos. Yo no estoy persiguiendo nada. Estoy perfectamente feliz siendo yo, ¡estando aquí!” Maravilloso. Eso significa que estás haciendo algo bien. Cuando estás frustrado, cuando estás enfadado, cuando estás enfermo y de mal humor, no estás feliz. Eso significa que no estás alineado con la voluntad de Dios para ti. Dios quiere que seas feliz. ¡Está bien!
Pero sufrir, sacrificarse, trabajar duro, hincar los codos son una enseñanza cultural. Hay algunas de estas frases en tu sociedad. Están diseñadas para hacerte infeliz. Una persona infeliz no es alguien conectado a su verdadera fuente de poder, por lo que se cansa y se desilusiona. Desilusionado significa que todavía cree en las ilusiones.
Asegúrate de estar feliz. Asegúrate de estar conectado, aunque sea por un momento. Agradece que puedas hacerlo por un momento. Cuando se vaya, al menos conoces la sensación.
Yo soy aquel que conoces como Jesús, y estamos felices de verte mañana.